Selección del vestido ideal para la boda
La emoción del proceso de compromiso con la pareja a la realización del evento de la boda puede llegar a ser un proceso realmente hermoso, pero como estresante. Es el deseo de que todo en este día tan especial salga perfecto, desde la participación de los invitados, el sabor de la comida, la decoración alineada a una temática, los manteles para bodas,el show musical y los votos, entre muchos esenciales, sin olvidar un elemento de los más importantes, el vestido de la novia.
Son muchos los factores para tener en cuenta al momento de seleccionar el vestido ideal para este día tan especial y recordación futura. Conocer los diferentes tipos de tela para vestidos, facilitará el proceso de selección, puesto que las características se ajustan a la personalidad de la novia, tipo de piel, clima del lugar a realizar el evento, locación en general y temática.
¿Cuáles son los tipos de tela para vestidos de novia?
Se considera de mayor importancia el tipo de tela del vestido, más que el propio diseño, ya que la tela, es quien dará la forma del vestido y permitirá el ajuste apropiado al cuerpo de la novia, para la belleza de la futura novia. Entre la amplia variedad de telas, se pueden encontrar: el brocado, chifón, tul, encaje, crepé, otomán, dupión, entre otros. Cada tipo de tela genera una sensación diferente, desde una estructura firme de contextura, hasta delicadeza. Es importante encontrar un vestido donde se sienta y note la autenticidad y excepcionalidad, que sea algo realmente único. Después de la selección de la tela y el diseño, se pasa a la etapa de confección, donde se buscan patrones de calidad y prime la comodidad, pues en todo el día del evento la novia debe sentirse cómoda pero bella, sin dejar de lado el romanticismo y los detalles de feminidad; a la vez de elegancia, glamur y originalidad con las diferentes formas y detalles.
Una de las mayores preocupaciones respecto al vestido de novia, es con cuanto tiempo de anticipación se debe de empezar la búsqueda para la confección y tener todo listo si es necesario realizar ajustes. La recomendación ideal es iniciar con una anticipación de 6 a 9 meses, con el fin de tomarse el tiempo de indagar por los diferentes tipos de telas, diseño y explorar las infinitas posibilidades que existen en el mercado, esto si se decide optar por confeccionar el vestido a la medida y gusto. Por el contrario, si se decide comprar un vestido totalmente listo, el tiempo puede ser menos, puesto que el esfuerzo consiste en la búsqueda y hallazgo del vestido ideal, por lo cual, la decisión final del vestido de bodas dependerá del tiempo faltante para el evento de la boda y el presupuesto con que se cuente. En todo caso, seguramente al momento de la búsqueda del vestido especial, se sabrá desde el momento que se vea, será el vestido con el que la novia se sienta cómoda para disfrutar de la celebración del amor hacia con la pareja, y con quienes más se ama.